30 cosas sin relación alguna, pero que me gustaría comentar.

1.- Puedo comer 5 kilos de manzanas.
2.- Detesto barrer, pero me gusta trapear.

3.- Tengo nueve almohadas.

4.- Mi habilidad especial es borrar archivos de la computadora sin darme cuenta.

5.- He llegado a gastar 750 pesos en donas al mes en Krispy Kreme

6.- Quisiera tener una lancha.

7.- Me gustaría dar clases de historia y dibujo técnico.

8.- Tengo debilidad por las mujeres con bata (entiendase, médicos, veterinarias, psicólogas, enfermeras, odontologas, quimicas)

9.- De poder, abriría una escuela

10.- En la vida me subo de nuevo al Kilawea de Six Flags (tan solo recordar el guuuuuuuuuuuush tssss es feo)

11.- Una vez comí unos "huaraches" y no los pague -sin darme cuenta, claro-.

12.- Nunca he trabajado.

13.- Me gustaría abrir un restaurante.

14.- Mi sueño frustrado es ser piloto aviador.

15.- He ido a clases de árabe, francés e italiano durante menos de un mes.

16.- Soy fan de Nina.

17.- Quiero una cámara nueva.

18.- El viaje de mi vida seria ir al festival de jazz de Montreal.

19.- Tengo 67 pares de calcetines.

20.- Me gustaría ser golfista profesional.

21.- Me molesta la gente que cuando comenta la foto de una niña, en alguna red social escriba: "Hola, te ves muy guapa, no te conozco, pero de seguro podemos ser amigos"

22.- Me gustaría tener un viñedo.

23.- O una editorial en su defecto.

24.- Mi perro es un güevon.

25.- Haciendo una maqueta casi me saco un ojo.

26.- De chico confundía la "b" y la "d".

27.- Quisiera ser policía.

28.- Estoy enamorado de mi doctora de Veracruz.

29.- Lo acepto, yo robe el diurex de Paola.

30.- Tengo en el librero 9 libros sin leer,que se supone iba a acabar antes de Noviembre (del 2007)

Al final

Su mano ahora temblorosa busca en la oscuridad el apagador de la recámara, con la luz encendida entra a la habitación mientras se apoya en su bastón. Sus ojos opacados por la edad miran los objetos a su alrededor, llenando su cabeza de recuerdos que en unos años el Alzheimer lo hará olvidar.

Logra sentarse con dificultad en el borde de la cama. Sobre el pequeño librero que en su juventud el mismo construyo yacen viejos libros de amarillos bordes, inclinados, empolvados y otros atacados por los insectos. La pequeña guía roji de apenas 30 paginas en 1982 de la ciudad de México -que compro en aquella ultima ocasión que vio a hermano- se encuentra sobre aquellos discos de vinilo, que aquella vieja revista le enviaba por correo.

Limpia el polvo de aquellas cubiertas de papel que los protegen, mientras lee los títulos de "Las obras maestras de la música clásica" y se le antoja oír "La obertura festiva 1812" pero el tornamesa cubierto por una gruesa capa de polvo, hace mucho que dejo de funcionar.

Toma y ojea aquellos viejos libros, los cuales al abrilos revelan historias pasadas mientras inundan el aire con un olor a viejo. Entre aquellas páginas de textura terrosa, se aprecian notas y recados que sus hijos entonces adolescentes escribieron; iniciales dentro de corazones de amores ahora olvidados, dibujos mucho mas interesantes que la pesada clase de etimologías y contraportadas repletas del nombre de una niña.

La pintura descolorida de las paredes y las grandes manchas de humedad en el techo revelan el descuido de la casa, de la cual el hizo hasta los ladrillos y que ahora es sumamente grande para el solo.

Después de varios intentos finalmente logra levantarse de la cama, abre el gran ropero de caoba, que compro recién casado y en el cual todavía esta acomodada la ropa de su esposa. El mismo ropero del cual ahora sus nietos le roban dinero, en lugar de esos dulces que hace muchos atrás sustraían.

En la sala enciende el televisor y sube el volumen pues con dificultad escucha. De las paredes cuelgan los retratos de familiares y amigos: hermanos, hijos, nietos y biznietos. Momentos congelados en el tiempo de infancias lejanas y juventudes desperdiciadas; cumpleaños o reuniones familiares; navidades y otras esporádicas fechas alegres; amigos que murieron hace mucho, al igual que su amada esposa. Rostros, acciones y momentos que alguna cámara encerró hace mucho tiempo.

En la noche, la cena es un rebozado plato de una insípida sopa de verduras y ocupa tan solo uno de los habitáculos de aquel comedor para doce personas.

El teléfono suena, pero entre su pesado caminar y su disminuido oído, hacen que cuanto conteste, aquel al otro lado de la línea termine la llamada, y en vano se queda esperando a que el aparato suene de nuevo.

Con tan solo una camisa y un gastado short como pijama, se acuesta a dormir, aquella vida repleta de risas, emociones, viajes y demás vivencias ahora se ha ido.

Su esposa nunca más se acostara en esa cama junto a el, sus pequeños hijos ya no gritaran en la mesa a la hora comer, ni sus amigos se reirán hasta el borde de las lágrimas mientras platican en la sala.

...lo único que le queda, es la soledad.

Por favor.

-¿Y por qué tan feliz?

-Porque la voy a ver.

-Apoco todavía la quieres.

-Si, ¿Por qué habria dejado de hacerlo?

-No crees que ya paso mucho tiempo.

-Apenas dos años, en realidad casi tres.

-Te conozco, eso es mucho tiempo... de seguro ya hubo 10 más.

-Quizá, pero no otra como ella. Bueno a lo mejor una.

-Jajajajajaja eso crei.

-Pero no importa, estoy muy emocionado, pocas veces me he sentido tan feliz.

-Si pashi, no te cabe la sonrisa en la cara.

-¿No tienes miedo?

-¿De?

-Tú sabes...

-Si, mucho. Pienso a cada rato en eso:

¿Si ya no es la misma?

¿Y si cuando la vea se acaba el encanto?

¿Si me lastima de nuevo?

¿O si tan solo ella es un bonito recuerdo?

...

Es más, me pregunto si todavia le gustaran los Choco Krispis, era de las pocas cosas dulces que comia.

-¿Ya sabes a donde van a ir?

-A donde ella quiera; a comprar un helado, comer un hotdog, ir al cine ó simplemente estar.

Blanco, verde, negro,café.

-¿Qué te pasa?

-Sus colores favoritos... al menos los que le gustaban entonces.

-Se nota que la quieres bien.

-Solo un poco.

-Nada más.

¿Otro cigarro pashi?

-Por favor.

OMG III (ó de como abusar del photoshop)

Me quede sin palabras realmente, lo más cagado, es que

hay personas que todavía respondieron "chida pic"

P.D.

Ya saben click en la imagen para cagarse de risa a gusto.

Ella

Caminaba por el parque y fue ahí donde te vi, parada a un costado del paseo de Santa Lucia, mientras veías pasar a las personas en los pequeños botes. No esperaba verte -al menos no ese día- había llegado en la mañana y decidí hacer un pequeño recorrido por la ciudad.

Me acerque sin que lo notaras y me pare a tu lado.

-Hace mucho calor ¿no? -te dije

-Si -respondiste-

Volteaste a verme de nuevo y finalmente me reconociste, pero todavía había cierta duda en ti.

-¿Miguel?

Volteé a verte con una sonrisa.

-¿Qué haces acá? -dijiste al mismo tiempo que me abrazabas- tiene años que no se de ti.

-Bueno. En realidad, ya nunca me buscaste para ser exactos -respondí con cierto tono melancólico-.

-Si, lo sé -y miraste hacia el piso-.

Como si el pasado hubiera dejado de existir, me sonreíste y volviste a preguntar que hacia ahí.

-Nada en especial, solo vine de visita, llegue hoy en la mañana.

-¿Cuando te vas?

-Todavía no lo se -conteste-.

Volviste a sonreír, me abrazaste de nuevo

-Perdón, estoy contenta. ¿Cuando nos vimos por última vez?

-La vez de los hotdogs.

-Si si si, es cierto, nos la pasamos bien ese día.

-Si.

Mi teléfono sonó y te dije que tenia que irme

-¿Tienes plan para hoy? -dijiste enseguida-.

-No, todavía no.

-Te doy mi cel, y pasame el tuyo.

-¿Y si no quiero?

-Hay que humor el tuyo.

-Es broma chaparra.

-Entonces te marco en la noche para vernos. ¿No conoces nada o más o menos tienes idea de algún lugar al que quieras ir?

-No, nada todavía. Te digo que acabo de llegar.

-Bueno, te voy a llevar a un lugar que me encanta, te va a gustar.

-Lo sé -te abracé y me despedí de ti-.

No me cabía la sonrisa en la cara.

Después de tantos años, por fin nos habíamos vuelto a encontrar.

Solo deseaba que anocheciera para salir contigo.

Ya quería verte de nuevo.

Lo necesitaba.

Tenía que volverte a ver... y matarte.

OMG II (ó ¿por que existe gente asi?)

En mi clase computación, volteo a ver el monitor del wey de a lado, y leo en su nick del msn:

"Soy fresa pero no de tu mermelada"