Today is...

sábado, 10 de abril de 2010

Only fools...



Despierto.

Sigue dormida.

Me doy vuelta y al abrazarla siento que trae puesta su chamarra, sigo acariciando su cuerpo y siento la suavidad de sus piernas desnudas, le aparto el cabello de la cara y le doy un beso en la mejilla. Se despierta y con intensiones de seguir durmiendo me pregunta que hora es.

Casi las 8 -respondo-.

Se acomoda y sigue acostada, con su mano acaricia mi cuello y me jala ligeramente el cabello. Me dice que se tiene que ir, por alguna razón no quiero que lo haga.

Pensé que te quedarías a desayunar -le digo-.

No puedo, mi mama quedo de pasar por mi a mi clase -responde-.

Me hago a un lado y me levanto de la cama, empiezo a vestirme y voy a la cocina.

Regreso con dos botes de yogurt y las donas que habíamos comprado antes de llegar a la casa.

Ella ya se esta vistiendo.

-¿No te vas a bañar cochina?-

-Ya no me da tiempo, mi clase es a las 9-.

Me senté junto a ella y termine de vestirme, tome las llaves y salimos. No paso mucho hasta que pasara un taxi y nos despedimos. Por primera vez no quería que se fuera.

Tenia hambre, así que camine al metro para ir a desayunar.



*******



Ya era tarde, sobre el buro el teléfono comenzo a vibrar, un mensaje.

¿Qué decía?

Básicamente; que si nos íbamos a ver hoy.

Tarde un poco en contestarlo, no sabia si hacerlo para ser sincero.

Tenia cerca de un mes sin saber nada de ella y las ultimas veces que nos habíamos visto no lo había pasado del todo bien.

Le respondí que si, preguntando por el lugar y la hora.

Me dijo el lugar donde estaba trabajando y que salia a las 11. Quede de verla fuera del trabajo.

No lo habíamos pasado muy bien las veces anteriores y bueno ya casi un mes que no me buscaba.

Si bien los hombres podemos fingir amor e interés con facilidad, lograba hacer que ella realmente lo pensara... de hecho en un principio lo estaba pero ya hacia mucho que solo lo fingía.

Por que no la dejaba, no se. Mis amigos siempre me lo han preguntado, si tenia novia. Por que estar con otra persona.

La respuesta, bueno realmente no lo se, quizá solo sea que no me gusta estar solo.

Deje pasar un rato y me metí a bañar. No me arregle mucho, bueno quizá un poco.

Llegue a donde habíamos quedado y le hable, me dijo que salia en media hora que la esperara. Hacia frío y no llevaba suéter. Comencé a impacientarme y encendí un cigarro.

Paso la media hora y quince minutos mas, finalmente salio. Se disculpo por el retraso, le pregunte que quería hacer y me dijo que fuéramos a un bar.

Caminabas y platicabamos, sentía su indiferencia, originada quizá por que deje de buscarla o por que ella ya no estaba interesada.

En cierta forma estaba bien. A como estaban las cosas; si terminaba, mejor para mi.

Decidí actuar como si fuera tan solo una amiga mas.

Platicabamos, del trabajo, la escuela y que habíamos hecho. Me contó que había regresado al gimnasio y pensaba regresar a estudiar, esta vez filosofía.

Tambien de tu bulimia y tus otros problemas que siempre me han hecho creer que estas loca.

Quizá eso es lo que me gusta de ella, no tiene miedo -por decirlo de alguna forma-, con el alcohol ambos nos relajamos y la pasamos realmente bien, nos empezábamos a divertir y reíamos contando anécdotas.

Empezamos a caer en el juego de la coquetería, dejaste de ser indiferente. Comencé por tocar su mano, ella por acariciar mi brazo, al poco tiempo nos abrazamos.

Comenzaste a buscar mis labios y nos besamos, un beso rápido, que apenas duro. Con tus brazos rodeaste mi cuello, acercaste tu cara a la mía y me dijiste que me querías. Yo solo sonreí.

Seguíamos platicando, y empezaba a darme cuenta de nuevo por que me habías gustado cuando recién te conocí. Pedimos la cuenta y caminamos un poco, me la había pasado muy bien. Te pregunte si querías ir a mi departamento. Me dijiste que no podías.

Me entristeció un poco la respuesta, quería que te quedaras, así que te insistí y logre convencerte.

Caminamos hacia la casa, y sacaste una de las donas que habiamos comprado antes. Te veias chistosa comiendola. Tome como pretexto el frio para abrazarte, nos besamos y seguimos caminando.

Llegamos a la casa, eran casi las 2 de la mañana, dejaste tus cosas sobre el sillon y te fuiste directo a mi cuarto, yo entre a la cocina por un vaso con agua. Te alcanze en la recamara, tenias tanta sed que te acabaste el agua apenas te la di. Dejaste el vaso sobre el buro y te acostaste.

Yo cerré la puerta y apague la luz...



*******



Regresaba de desayunar y no podía dejar de pensar en ella.

El teléfono vibro dentro de mi bolsillo, era ella diciendo que se la había pasado muy bien.

Sonreí, y fue entonces que me di cuenta que: jugando al amor, me enamoré.

3 comentarios:

Hija de la Luna dijo...

WOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOW!!!
¡¡APLAUSOS!! ¡¡APLAUSOS!! ¡¡APLAUSOS VECINO!!
I LOVE THIS ONE... :)

A.A.B.P.M dijo...

me gusto.
Más casual que tus demás cuentos :OOYE TE GOLPEAN Y YA HASTA DEL FB ME ELIMINASTE!!!!!!!!!!!!

A.A.B.P.M dijo...

y como porque querrias hacer esO?
del F.
ppff...
la manera en la que escribiste este cuento no es como las otras nO lo se lo sentí más ligero :) tkm